lunes, 22 de diciembre de 2014

Des-encorsetar los presupuestos



CCOO estará el martes 23 de diciembre en los aledaños del parlamento vasco, para reclamar desde la calle unos presupuestos de compromiso social y efectivos para el relanzamiento económico. Para ello sería necesario que las instituciones se conjurasen para aligerar los pesados corsés que hoy lastran cualquier presupuesto público.

Los términos del llamado Pacto de Estabilidad y Crecimiento Europeo, sus normas de disciplina fiscal y los efectos derivados en España y en propio ámbito de la autonomía vasca, topan el límite de déficit en el 0,7% del PIB de la CAPV (el previsto para 2015 ascendería a 67.081 millones de euros).


jueves, 18 de diciembre de 2014

Los motivos "del otro" y los acuerdos sociales


Leo en varios comentarios que el Gobierno ha accedido a pactar la ayuda para la inserción de las y los desempleados de larga duración, por una cuestión electoral. Está débil en las encuestas, con una pésima imagen producto de las políticas anti-sociales y la enorme tasa de paro, y eso le lleva a replantearse, siquiera parcialmente, su unilateralidad y avenirse a negociar con las organizaciones sindicales estas medidas.

Como el motivo del electoralismo se considera “espurio”, algunos (que no todos ni todas) concluyen que las organizaciones sindicales no debiéramos “dar cobertura” a esa escena. Yo respeto todas las opiniones, pero sinceramente creo que las organizaciones sindicales, al menos las que ponen en valor su autonomía sindical, no deben moverse en base al razonamiento moral sobre los “motivos del otro”. Tampoco creo que estemos para cuestionar las legitimidades de los otros ni para movernos a impulsos del calendario electoral. Más bien estamos para desde nuestra legitimidad otorgada democráticamente por las y los trabajadores, confrontar propuestas, tratar de negociarlas y llevarlas a buen puerto. Ante los Gobiernos,  ante las patronales o ante las empresas.

sábado, 13 de diciembre de 2014

La crisis es historia... o ¿historias de la crisis?


La consistencia del discurso del Gobierno es abrumadora. Decir que la crisis empieza a ser historia, o que la recuperación la notan las familias, con expresión de triunfo, es "disculpable" en el terreno del forzoso optimismo pre-electoral. Pero si uno se fija un poco observa la incoherencia entre las políticas impulsadas y el supuesto resultado de las mismas.

Desde que se cerrara cualquier atisbo de política económica anti-ciclo en Europa, los Gobiernos se han dedicado con furor a aplicar políticas de austeridad. Venían a tener un relato que en el caso español sería algo así como "necesitamos una fuerte devaluación interna que permita a la economía española ganar competitividad exterior e interior mediante el factor precio, para así promover una recuperación más vigorosa y sostenible del empleo y la actividad". 

miércoles, 26 de noviembre de 2014

Barreras al "empleo juvenil"


Ayer, 25 de noviembre, participé en un Fórum organizado por la fundación Novia Salcedo sobre la problemática del empleo joven. En la mesa redonda se nos instaba a describir las barreras de accesode la juventud al empleo y como estamos trabajando ante ellas.

La primera barrera de acceso tiene que ver con el “muro general” que existe en este momento producto de la situación económica. Estamos ante las consecuencias del bloqueo financiero de 2007 y la incapacidad de encontrar alternativas de empuje económico que sustituyan la exuberancia financiera pre-crisis. Es más, producto de las políticas de austeridad y devaluación interna, agravamos la misma y ralentizamos la salida. Por tanto estamos ante una crisis de demanda solvente que contrae la actividad y destruye empleo de manera general, y de forma más acusada entre la juventud.

lunes, 17 de noviembre de 2014

Casta, anti-casta y Maroto



Si uno mira retrospectivamente los resultados de las últimas elecciones europeas en distintos países, casi todos los partidos que salieron bien parados tenían un elemento en común. Fueron capaces de argumentar una causa simple a problemas complejos. Apurando un poco más, fueron capaces de identificar un relato sobre lo que sucede en el que aparece un culpable reconocible. Punto y aparte. Hasta aquí llegan los puntos en común para que nadie me malinterprete.
En España parece obvio que algo así sucedió y está en buena parte detrás de algunos de los fenómenos políticos que ocupan y preocupan ahora. La irrupción de Podemos o la cuestión catalana tienen en este momento mucho de respuesta simple a la endiablada tormenta perfecta de la situación política, económica y social.
El auge de estas dinámicas políticas es mucho más complejo que eso, es obvio. Como apuntes de contexto citaría al menos algunos: Hay un agotamiento de los vínculos de representación entre la sociedad, las instituciones y los canales de delegación/vertebración en los que se constituía el espacio público. Singularmente los partidos políticos.
Una transición política con riesgos generó partidos cerrados, aparatos crecientemente autonomizados de una sociedad, por otro lado, muy desvertebrada y con tendencia a desentenderse del gobierno cotidiano de lo común. No es casualidad que en los territorios del estado con mayor vertebración social, la dinámica actual tenga sus propias formas, sea el caso catalán (entre otros factores con un hecho nacional evidente), sea el caso vasco donde los partidos clásicos sufrirán desgaste de imagen, pero no el desplome de otros lares.

martes, 14 de octubre de 2014

Reflexiones sindicales para la izquierda




El pasado año 2012, la Fundación 1º de mayo de CCOO concluyó un libro coral titulado “Un sindicalismo para el futuro. Reflexiones sobre el trabajo y el cambio social”. El libro es producto de varios meses de reflexiones y debates realizados en el seno de la fundación por 35 personas. Sindicalistas, personas vinculadas con la universidad, miembros de diversas fundaciones, etc., todas ellas con el nexo de haberse acercado desde perspectivas variadas al hecho sindical, y por concretar más, al sindicalismo confederal y de clase que representa CCOO.

El libro es ambicioso en cuanto a la temática que abarca, no limitándose a una visión simple de la evolución, realidad presente o visión futura del sindicalismo, sino que compendia con cierta profundidad los cambios de paradigma que la economía, el mundo del trabajo y de la empresa, así como la propia sociedad viene atravesando en los últimos tiempos. Desde esta apertura de miras proyecta opciones de actuación futura en el plano de la acción sindical y desde la acción organizativa del sindicato, como dos partes necesarias para reforzar el sujeto colectivo de transformación que aspiramos a seguir siendo.

martes, 7 de octubre de 2014

7 de octubre. Trabajo decente o barbarie


El 7 de octubre se celebra la jornada mundial por el trabajo decente.

Es conocida la pérdida de peso de las rentas del trabajo sobre la renta nacional en las economías del mundo desarrollado durante las décadas que van de los años 60-70 del siglo XX hasta la actualidad. En la UE-15 el porcentaje de remuneración de los asalariados sobre PIB pasó del 61,5% del año 1975 al 56,8% del 2.011. En EEUU la evolución es similar pasando del 66% de 1970 al 59% de 2011.

También sabemos de la creciente incorporación a los circuitos de producción y comercio de bienes y servicios de zonas inmensas del mundo, con estándares laborales inexistentes o de escasa calidad, y que ejercen una presión a la baja sobre las condiciones laborales

En Europa vivimos las consecuencias de una integración económica en una zona monetaria sin una correspondiente integración política que pudiera rehacer democráticamente el contrato social que caracterizó el periodo de postguerra.
 

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Apuntes en el Consejo Confederal

Adaptación por escrito de la intervención en el Consejo del 23 de septiembre con "algún adorno"...;-) 


El informe presentado en el Consejo Confederal del 23 de septiembre por I.F. Toxo recoge de forma coherente y concreta un análisis de la realidad económica y social que vincula con propuestas sindicales y la estrategia para llevarlas a cabo.

En el aspecto económico supone una especie de contra-argumentación al optimismo exagerado que desde el Gobierno y aledaños se pretende imponer. Por un lado CCOO deja claro que en nuestra escala de valores no sirve con la mejora macroeconómica que en algunas variables se producen. Tras un largo periodo de tiempo con dos recesiones de consecuencias dramáticas en el empleo y la cohesión social, si no hay una mejora del empleo neto y no se produce una recuperación de derechos y garantías deteriorados no podemos hablar de salida de la crisis. No es lo mismo salir de una recesión que de la situación de crisis.

sábado, 20 de septiembre de 2014

Neoliberalismo y austeridad. Auténticos disolventes sociales


Escocia ha decidido mantenerse dentro del Reino Unido. Con un compromiso compartido de profundizar su autonomía y una mayor vocación europeísta que la que pueda tener la propia Inglaterra, dicho sea de paso.

Sin embargo la opción de la victoria de la independencia llegó a parecer factible en alguna encuesta. Los resultados lo han desmentido. Sin embargo hay un elemento que ha sido bastante relevante. La relación fortalecida entre la defensa de un modelo social que se pretendía vincular con la independencia, frente a una propuesta de recortes y cuestionamiento de tal modelo social que se relacionaba con las políticas impulsadas desde el centro londinense y el Gobierno tory.

Empieza a ser común que los movimientos políticos que aspiran a erigir sujetos políticos de soberanía única, aparquen las clásicas legitimidades nacionales para buscar esa propuesta de salvaguarda de un modelo social como su principal activo. Aspiran así a recoger la reacción de mayorías sociales ante el deterioro de sus condiciones de vida, sus salarios, sus empleos o sus prestaciones sociales.

En los propios resultados del referéndum escocés llama la atención que la gran victoria independentista se dé en Glasgow, situada en la segunda área metropolitana del Reino Unido, centro económico y comercial, más cosmopolita que Edimburgo y evidentemente que las zonas rurales.

No parece descabellado pensar que Glasgow, cuna del sindicalismo donde sigue erguida la estatua de Pasionaria, pero sobre todo, donde se dobla la tasa de paro del resto del país, vote mayoritariamente independencia como un rechazo a los efectos de políticas que considera negativas y que vincula al centro de Londres y al riesgo de que tales políticas se acentúen.

No comparto la idea de que la independencia de los países sea la solución-fórmula para salvar el modelo social, sino más bien que es necesario federalizar las distintas instancias de poder para reforzar el carácter democrático de un poder central en Europa. Sólo así se pueden ensanchar auténticas alternativas a las actuales políticas de austeridad para que den dimensión social al autogobierno de estados y entidades sub-estatales. Es mi opinión a muy grandes rasgos, pero no es lo que quiero desarrollar aquí.

Más bien me interesa poner el foco en el enorme efecto de disolvente de los vínculos sociales y ciudadanos que las actuales políticas económicas y su legitimidad democrática están generando en las sociedades.

Un discurso dominante, privatizador, que pretende disminuir la acción del poder público a la hora de garantizar determinadas contingencias sociales, es un discurso que en el fondo dice: “hágalo usted mismo. Diseñe su vida con los recursos que sea capaz de conseguir por su cuenta y opte en el mercado por lo que desee”Si se disuelven las dependencias mutuas, los lazos con los anónimos que lleva implícito un modelo social ¿alguien puede extrañarse que resurjan con fuerza lealtades identitarias con lo cercano?

Si además las políticas que se recetan desde esos poderes difusos son políticas de recorte, de empobrecimiento, de inseguridades ¿alguien puede extrañarse que se vincule la oposición a esas políticas socialmente rechazadas, con el retorno a lo conocido, a lo fragmentado, al calor de las viejas certezas?

Si el ejercicio del poder se ha trasladado desde espacios abarcables y conocidos por los ciudadanos, hasta el terreno difuso de lo global, de los mercados, de troykas o cosas de ese tipo; si además se ha hecho con un proceso de legitimación democrática inexistente o discutible y pedagogía social débil, ¿alguien puede extrañarse, cuando las cosas vienen mal dadas, de una reacción que reclame fragmentar los espacios de decisión política, sea esta decisión racional o no?

Si no se es capaz de conjugar un nuevo compromiso por la igualdad, la cohesión social, el derecho de ciudadanía vinculado al derecho social, en definitiva un contrato social en el marco global europeo ¿alguien se puede extrañar que todas esas aspiraciones de las mayorías sociales se vinculen con fuerza a nuevos sujetos de decisión, sean nacionales, corporativos, de renta, o de afectados de tal o cual problema?

La deficiente construcción política europea, el ejercicio hegemónico del poder factico sin suficiente legitimación democrática, y el ahogo que el austericidio supone para partes crecientes de población, son un auténtico disolvente de relaciones sociales, de dependencias compartidas, de laicidad identitaria.

Evidentemente la alternativa no es negar realidades nacionales, ni proscribir problemas políticos, ni mucho menos la amenaza o el tancredismo. La alternativa debiera pasar por reformular en un contexto de economía global y crisis sistémica, una construcción política de Europa en un modelo federal de estados y de entidades subestatales. Un refuerzo del valor de la ciudadanía compartida como elemento de pertenencia ligado al derecho a algún nivel de inclusión social garantizada. Una opción política sobre la igualdad redistributiva que vaya más allá de la igualdad de oportunidades.

Las dinámicas políticas en Escocia o en Catalunya tienen mucho de respuesta a esta situación, con otros elementos coyunturales propios que poco tienen que ver unos con otros. La extensión de la opción fragmentaria es real y puede calar de nuevo en territorios como el norte de Italia y otros. Fragmentación no necesariamente nacional, sino de otros intereses compartidos que aspiren a erigirse como sujetos de decisión.

Una izquierda agregadora frente a una austeridad disolvente.


miércoles, 10 de septiembre de 2014

La productividad de la OCDE


La OCDE ha instado a ligar estrictamente salarios y productividad. Toxo ha contestado acertadamente que el factor de productividad ya se tiene en cuenta en las subidas salariales en el ámbito de las empresas.

Si en España se hiciera caso al sentido literal de la recomendación de la OCDE y se ligaran las variaciones salariales a la productividad, se incrementarían fuertemente los salarios en el momento en el que se destruye fuertemente el empleo. Porque en efecto, en las recesiones se destruye empleo a una velocidad enorme. Por concretar más, por las características de la crisis de 2007, en un primer momento el empleo más volátil, en sectores de mano de obra intensiva, normalmente de menor cualificación y con menores niveles de remuneración. Lo vimos tras la sangría de puestos de trabajo tanto en la construcción y sectores asociados (con sus particularismos en el modelo de desarrollo español) como en otros sectores de servicios normalmente ligados a la demanda interna: enorme destrucción de empleo y a la vez, incremento de la productividad del trabajo a nivel agregado.

miércoles, 27 de agosto de 2014

La patria paradójica


Fran es un guía que trabaja en una empresa que organiza “tours” por Escocia para turistas. Este verano nos contaba que en Edimburgo residen 16.000 españoles registrados en el consulado de la ciudad, pero que otro tanto o más, viven allí sin estar registrados. Cotejados los datos, veo que no le andan desencaminados situando el propio Cónsul en 12 mil y 25-30 mil respectivamente las cifras citadas, hace un año.

Nos relataba también (Fran, no el Cónsul…) algunas de las “ayudas” que recibían por vivir y trabajar allí (un día) respecto al alquiler, la educación y otras. Interpretaba él que el flujo de inmigración en edad laboral  y con una escasa utilización de algunos servicios públicos (la sanidad por cuestiones de edad, la educación porque suelen ir sobrecualificados, etc.) le viene bien económicamente a Escocia. De forma paralela a un sistema de contratación muy flexible tienen una red de protección social importante. Nos decía que si pierden eventualmente el trabajo, la administración se hace cargo del alquiler de la vivienda, incluso aunque el pago del mismo sea alto. De esta manera se posibilita mantener un nivel de gasto y ahorro apreciable y una satisfacción razonable de los “inmigrantes”.

jueves, 3 de julio de 2014

El acoso a la protesta laboral, o prevenir los efectos de la desigualdad


Ayer conocimos que ya son menos de la mitad de las y los trabajadores activos os que tienen un empleo a tiempo completo con contrato indefinido. Creo que por primera vez y sino ya vendrá el termómetro de Ana Pastor a corregirme. O dicho de otro modo, ya son más de la mitad de las personas que buscan o y no encuentran, o tienen un puesto de trabajo con un contrato temporal, o uno a tiempo parcial, o las dos cosas a la vez. Precarización del empleo muy profunda y muy rápida.

Además se ha debilitado el poder vinculante del convenio colectivo e incluso se abre la puerta a su disolución. Es decir, las normas laborales colectivas, que impulsan una tendencia a cierta cohesión en las condiciones de trabajo de la gente son normas que cada vez ofrecen menos certidumbres, cubren a menos gente (especialmente en Euskadi), e incluso corren el riesgo de desaparecer. Por tanto la tendencia a la fragmentación y segmentación de condiciones de trabajo puede aumentar de forma rápida.

viernes, 13 de junio de 2014

Huelga no es delito


Se solicitan penas de hasta 3 años de cárcel para  un sindicalista de Navantia y dos afiliados a CCOO. 8 sindicalistas de Airbus se enfrentan a peticiones de 66 años de cárcel por ejercer el derecho a la huelga. La fiscalía solicita cuatro años y medio de cárcel para la secretaria general de Illes Baleares de CCOO, por hechos sucedidos en la huelga general de marzo de 2012, sobre los que no existe ni una sola prueba.

Manifestación solidaridad con los imputados Airbus
No son noticias sacadas de otra época. Son una breve reseña de los 49 procedimientos abiertos a 147 representantes y dirigentes del sindicato, promovidos por la Administración del Estado y el Ministerio Fiscal. En opinión de CCOO, se trata de una restricción ilegítima de los derechos democráticos y de una nueva vuelta de tuerca en la cruzada que ha emprendido el Gobierno contra las organizaciones sindicales. 

martes, 13 de mayo de 2014

La zona de confort de la izquierda


El 30 de abril se produjo una reunión en la Moncloa. Bernardette Ségol, Secretaria General de la Confederación Europea de Sindicatos presentaba al Presidente del Gobierno de España el plan de inversión, crecimiento sostenible y empleo de calidad aprobado por la citada Confederación Sindical. Una propuesta sobre inversión, fiscalidad, políticas financieras, papel del BCE, eurobonos, etc. Un plan avalado por sindicatos de países periféricos endeudados, pero también de países centrales acreedores.

Es llamativo que organizaciones con más de 60 millones de personas afiliadas e implantación en países cuyos gobiernos están situados en la dinámica deudor/acreedor en esta Europa maltrecha, lleguemos a una propuesta común. Mucho más llamativo es la poca trascendencia de la cuestión en las opiniones públicas, inducidas por las opiniones publicadas.

En medios de lo que podemos  llamar “la derecha” era previsible, inmersos en su obsesión de quitar cualquier relevancia al sindicalismo. Más significativo es lo que ha ocurrido en los que se sitúan comúnmente en la izquierda. No, no hablo sólo  ni principalmente de los impresos que están (o está) a la que están, sino de los propios medios digitales. “CCOO, UGT y USO inauguran la jornada reivindicativa con una visita a Rajoy” despachaba algún guardián de las esencias izquierdistas, omitiendo en el titular que esas tres organizaciones estaban en calidad de anfitriones de la CES.

miércoles, 30 de abril de 2014

Infundado optimismo

(artículo publicado en el Correo el 29 de abril)

Este Primero de Mayo se desarrollará, a diferencia de los anteriores, con un exceso de optimismo desde los mensajes oficiales respecto a la recuperación económica. Desgraciadamente, ese discurso tiene más que ver con coyunturas políticas y electorales que con el día a día de la gran mayoría de las personas.

La mejora de algunas cifras macroeconómicas no puede ocultar realidades palpables. Las tasas de desempleo, ocupación o cotización a la Seguridad Social se han deteriorado intensamente en los últimos años. En la CAPV sólo el 47% de las personas está trabajando, llegando esa proporción al 63% de los potencialmente activos. Lejos, muy lejos, del objetivo de la estrategia Europa 2020 que tiene por objetivo que el 75% de las personas de 20 a 64 años tengan un empleo. En el ámbito estatal los datos son directamente catastróficos.

jueves, 24 de abril de 2014

Fuimos, somos y seremos


Las dificultades económicas, el paro, la pérdida de convenios colectivos o el cuestionamiento del modelo social que tanto nos costó lograr, podrían indicar que no hay ninguna razón de celebración el 1º de mayo. Pensar eso sería perder perspectiva. Histórica y espacial.

No hace tantos años, apenas unas pocas décadas, organizarse sindicalmente conllevaba persecución, cárcel, tortura y a veces muerte. Estamos recordando estos meses hitos de las gentes que fundaron las CCOO y sufrieron procesos como el 1.001 con una condena de 162 años de cárcel a la dirección del sindicato. O los abogados de Atocha, 5 compañeros asesinados por pistoleros de extrema derecha por defender trabajadores desde una perspectiva sindical y sociopolítica.

En Euskadi las huelgas míticas de Bandas o las persecuciones en la Mina del Alemán a aquellas primeras CCOO, por citar dos hitos. Todavía algunos compañeros aparecen de vez en cuando por la sede y nos recuerdan como activaron aquel movimiento sindical. Y las palizas y disgustos que costó…

sábado, 15 de marzo de 2014

Nos sometemos al tercer grado


Este jueves apareció en El Correo una entrevista realizada por Isabel Ibañez sobre los sindicatos, su imagen, lo que se dice de ellos, etc. Frente a otras opiniones yo creo que hay que entrar a saco, fajarse en contestar y dar réplica a acusaciones que se nos hace desde algún ámbito. Por más disparatadas que sean. No comparto que sea ponerse a la defensiva o que entrar en el debate dialéctico es dar pábulo a la campaña antisindical

La entrevista es muy exhaustiva, y recogía buena parte de las acusaciones cotidianas que se oyen en algunos ámbitos. Con todo, y pese a su extensión, está recortada respecto a algunas preguntas y respuestas. He pensado poner aquí el bruto de la entrevista. No porque tenga nada que oponer al recorte necesario y bien hecho de la periodista, sino porque creo que el blog también puede servir para eso: no tiene problemas de espacio.

miércoles, 5 de marzo de 2014

Lo que quiso ser la manifestación de Bilbao

Artículo aparecido en Infolibre el 4 de marzo


Desde el momento que se conoció que Bilbao sería el escenario de un foro económico con presencia del FMI y otros organismos responsables de la orientación de las políticas económicas que se vienen aplicando, CCOO de Euskadi tuvo claras dos cosas. Que había que organizar algún tipo de movilización denunciando estas políticas; que había que simbolizar en la respuesta la dimensión europea y sindical.

lunes, 3 de marzo de 2014

Negociación colectiva. Cambian las preguntas

Artículo publicado en el Diario Vasco el 01-03-14

El sistema de relaciones laborales fruto de la negociación colectiva que hemos construido en Euskadi está en juego. En riesgo cierto de disolverse como un azucarillo. Y lo está por más de una causa. Interactúan causas y causantes, y no querer verlo o mirar el dedo cuando señala la luna, será responsabilidad de cada parte.

Digo esto al hilo de una carta abierta que un compañero del metal de LAB me remitía en estas mismas páginas y que estaba planteado desde los viejos  esquemas previos a la reforma laboral.

Han cambiado las preguntas: el marco en el que se desarrolla la negociación colectiva. Y eso implica resituar algunas cosas desde un interrogante previo: ¿Queremos tener un marco de negociación sectorial que proporciones una tasa de cobertura de convenio colectivo alta? O sea ¿Queremos que un porcentaje por encima del 80% de personas en Euskadi tengan un convenio de referencia? Porque hay quien sí quiere, y hay quien no quiere.

Es más, las dinámicas de la negociación colectiva en Euskadi no han cambiado sustancialmente desde la reforma laboral hacia aquí. Lo que han cambiado son las consecuencias de esas dinámicas. La renovación de los convenios siempre ha sido lenta y la tasa de cobertura de cada sindicato en función de los convenios que saca adelante siempre ha arrojado datos “sorprendentes”. Veamos.

sábado, 22 de febrero de 2014

#2mBilbon no es una manifestación más.


El domingo 2 de marzo, con presencia del Secretario General adjunto de la Confederación Europea de Sindicatos (CES) y compañeras/os de otras organizaciones del estado, Francia o Italia, convocamos a la ciudadanía a una manifestación. No es una manifestación más.

No lo es, porque se produce en la víspera de un encuentro significativo. El FMI, la Comisión Europea, directivos de grandes compañías o la OCDE se dan cita en el Guggenheim de Bilbao. Representantes institucionales ejercerán de  anfitriones empezando por el Presidente del Gobierno, el propio Lehendakari y el conjunto de las instituciones vascas.


Intervención Forum Europa. 17-04-2014



sábado, 8 de febrero de 2014

¿Se ocupan los sindicatos de los parados?


Presiento que al hilo de alguna movilización respecto al paro se va a volver a escuchar el recurrente mensaje de que los sindicatos no se ocupan ni se preocupan de las personas en paro, sino únicamente de aquellas que tienen empleo. Y habrá quien apostille aquello de “y sólo de quienes tienen un buen empleo”.

Adelanto dos cosas. No estoy de acuerdo con esa visión, pero la entiendo en función de quien la formule. Dicho claramente. Una persona que está en paro quiere un trabajo.  El sindicato no le puede proporcionar el trabajo. Por tanto la relación entre la persona y el sindicato es de insatisfacción.

Con recordar de forma superficial aquello de las jerarquías de necesidades de la psicología de Maslow, a cualquier persona que quiera trabajar y no pueda es muy probable que le importe un pito lo que yo pueda decir a partir de ahora. Lo acepto y lo asumo, pero pese a todo voy a seguir porque muchos de quienes acuñen la frase inicial estos días, ni van a ser parados, ni van a pronunciarla desde ninguna empatía real con el parado, sino más bien desde otros preceptos ideológicos.

sábado, 11 de enero de 2014

Sobre la manifestación del 11 de enero

Este artículo está suscrito por Santi Bengoa, Josu Onaindi y Unai Sordo, secretarios generales de CCOO de Euskadi desde el año 1987 hasta la actualidad


La actual política del Gobierno sobre la situación terminal de ETA y la consiguiente normalización política en Euskadi es un disparate.

Los anuncios hechos en las últimas semanas sobre la disposición del colectivo de presos a tomar una estrategia distinta, deben ser el penúltimo paso para la desaparición de ETA.

Este momento es histórico para el país y viene precedido de otros momentos históricos. Fundamentalmente el anuncio del fin de ETA y como se ha ido concretando este final. Sin ejercer ningún tipo de interlocución  sobre cuestiones  políticas y sin ninguno de sus objetivos logrados. Eso es un logro y un activo indiscutible de la democracia y de la sociedad. 

domingo, 5 de enero de 2014

Respuesta autoritaria a los conflictos sociales

Dentro del apartado de colaboraciones incluimos este artículo de Rodolfo Benito Valenciano (secretario confederal de Estudios de CC.OO. y presidente de la Fundación Primero de Mayo) Francisco Gualda Alcalá (director del gabinete de Estudios Jurídicos de CC.OO.)

Paco Gualda
Estamos en tiempos de crisis del sistema, en tiempos en los que se derrumban elementos estructurales que han venido conformando nuestro sistema económico, político y social, y se desatan las fuerzas que tienden a conformar unos nuevos equilibrios que recojan la posición de dominio que determinadas opciones políticas, clases sociales o estructuras de poder han alcanzado. Esto somete a tensión no solo el contenido de los derechos sociolaborales más básicos, como la educación, la sanidad, la estabilidad en el empleo, la vivienda o las políticas públicas de integración social, sino el espacio de libertades que posibilitan la participación ciudadana y, sobre todo, de las organizaciones y colectivos sociales en el debate político, que es el terreno en el que se adoptan las decisiones que van conformando un nuevo modelo de organización social.